¡Hola! ¿Habéis visto que requetebonito está mi blog? ¡Súper mega navideño! Estoy muy orgullosa...porque sólo me ha costado una semana de quebraderos de cabeza, o sea una semana de tragarme todos los tutoriales que había en la red, de buscar los fondos, de cómo poner el fondo completo, de ajustar los pixels, ufff...y lo que me queda, que después de esto "ya nada será igual", jajaja.
Ah! y la cabecera...¡de eso ni hablamos! que sólo la foto ya me costó hacerla...¡Vamos que las galletas que salen es lo que más rápido he hecho! ¡Manda narices! En fin todo sea por el espíritu navideño...
A todo esto yo os escribo para enseñaros esta tarta, esta riquísima tarta de calabaza, rellena de mermelada de calabaza casera y cubierta de Cream Cheese Icing.
Soy adicta a la calabaza, ¿os lo he dicho? Desde que empezó la temporada compro una todos los lunes (la tengo que comprar porque nuestro huerto este año se ha quedado sin calabazas porque un tejón decidió que "más vale verde para uno que maduro para otro" y nos dejó sin una sola calabaza), la aso, y hago bizcocho, magdalenas, o simplemente me la como de postre, y de desayuno, y de merienda...¡me encanta! Me encanta tanto que hago hasta mermelada de calabaza.
¿Os apetece hacer esta tarta estas navidades? ¿Sí?
¡Pues entonces os la cuento!
La receta del bizcocho la conocí de la mano de Ana María de Los manjares de Ana María. Es la siguiente:
- 250 gr. de azúcar
- 2 huevos tamaño L (yo siempre gasto esta medida)
- 80 gr. de aceite, yo le pongo de girasol porque no sabe nada, pero si os gusta podéis ponerle un oliva suave.
- 300 gramos de calabaza asada, la receta dice que 250 gramos, pero yo le pongo más...
- 250 gramos de harina
- 1 sobre de levadura tipo Royal.
Precalentamos el horno a 170 grados.
En un bol ponemos el azúcar y los huevos y batimos, después añadimos el aceite y seguidamente la calabaza, mezclamos todo bien, hasta que esté todo bien integrado.
En otro bol habremos mezclado bien la levadura con la harina y lo habremos tamizado. Entonces iremos añadiendo la harina, poco a poco, batiendo bien, a la mezcla anterior.
Para hacer esta tarta yo dividí la masa en dos moldes de 20 centímetros, que engrasé con spray desmoldante (con un poco de mantequilla también vale) y los horneé durante unos 30 minutos, hasta que al pinchar el bizcocho salió limpio.
Después, los dejamos enfriar sobre una rejilla. Cuando estuvieron fríos, con ayuda de la lira, hice dos capas con cada bizcocho, quedando 4 capas.
Unté cada capa con mermelada de calabaza y recubrí todo el bizcocho con Cream Cheese Icing, que saqué de El libro de Alma, que os recomiendo comprar, es el "abecé" de los cupcakes. Aquí os la pongo:
- 120 gr. de mantequilla a temperatura ambiente.
- 125 gr. de queso de untar, tipo Philadelphia, frío de la nevera.
- 300 gr. de azúcar glass, tamizado.
- 1 cucharada sopera de leche semidesnatada.
Batimos, con una batidora de varillas, el azúcar con la leche y la mantequilla hasta que esté todo bien integrado, poco a poco le añadimos el queso. Al principio batiremos a velocidad baja, y luego aumentamos la velocidad hasta que veamos que la mezcla sea cremosa. Esta crema, cuanto m´ñas la batamos mayor consistencia tendrá.
Para cubrirla utilicé el tutorial de Bea Roque en El Rincón de Bea, una espátula de textura, y el torno de mi amiga Esther...es que yo no tengo, ejem, ejem...(Queridos Reyes Magos, como este año he sido muy buenaaaaaaa....)
Por último la adorné con un poco de acebo hecho de fondant, y...¡unos corazoncitos! Y ya está...y desde el momento en que la acabé hasta la hora de la cena fui perdiendo trocitos, poco a poco hasta que no quedó nada...
¡Espero que os animéis y me enviéis muchas fotos de vuestras tartas al Facebook de El Aleteo de la Mariposa!